Belén Lopez Rubio es médico de familia en el Centro de Salud de Hernani. Hace casi un año que pertenece a la actual Junta de Gobierno del Colegio. 

Entró en marzo del 2017, y lo hizo en una nueva Vocalía, la de Tutores, creada en el 2016 por la Organización Médica Colegial (OMC). Desde entonces no ha hecho más que acumular proyectos y retos, de los que hemos querido saber. 

Al final de la entrevista escrita encontrarás la entrevista en vídeo

1) ¿Cómo y por qué llegaste hasta aquí?

Cuando se creó la nueva Vocalía de Tutores, el Colegio de Médicos de Gipuzkoa quiso que estuviera representada por un médico de Atención Primaria, entre otras razones, porque los tutores de Atención Primaria (AP) estamos más dispersos y tenemos más problemas en cuanto a la tutorización que los de Atención Especializada (AE). Contactaron con la Jefa de estudios de la Unidad Docente multiprofesional de Atención Familiar y Comunitaria de Gipuzkoa y ella me propuso asumir dicha Vocalía. Inicialmente lo rechacé, porque pensaba que iba a suponer demasiada responsabilidad, sobre todo, porque era una nueva vocalía. Pero por otra parte, también era un reto y una oportunidad para poder hacer algo de cara a mejorar la situación del colectivo de tutores así que finalmente acepté.

2) ¿Cuál es tu labor en la Junta?

La Junta de Gobierno es el corazón del Colegio. Realizamos reuniones de carácter mensual donde nos reunimos todos los miembros para tratar cuestiones muy diversas que nos afectan a todo el colectivo médico. En cuanto a mi vocalía, mi labor es la de recoger la realidad de los médicos tutores y trabajar, en la medida de lo posible, para mejorarla, a través, por ejemplo, de reuniones nacionales con los demás vocales, encuentros periódicos con los tutores de AE y AP (actualmente en Gipuzkoa somos 120 tutores), fomentando su formación continuada en ámbitos específicos de su quehacer o intermediando con Osakidetza para mejorar las condiciones de los tutores y la calidad de la tutorización.

3) ¿Qué pasos has podido dar durante estos meses?

Durante estos meses he asistido a reuniones de la Vocalía a nivel nacional y he mantenido contacto permanente con la Unidad Docente de Medicina Familiar y la jefatura de estudios de AE. También asistí al XIV Encuentro Nacional de Tutores 2017 de Sefse-Areda donde tuve oportunidad de conocer lo que se está haciendo en otras comunidades autónomas.

Por otro lado, he realizado un censo de tutores de Gipuzkoa y una encuesta para conocer su situación y vivencias del colectivo. En noviembre organicé la primera reunión de tutores de Gipuzkoa en la que, a pesar de que no asistieron todos, tuvimos un intercambio muy interesante de ideas. También he mantenido contacto por carta con D. Andoni Arcelay, Director de Asistencia Sanitaria, y espero poder reunirme a lo largo de este trimestre con él. Finalmente, hemos realizado, en colaboración con Fundación del Colegio de Médicos, un curso de formación para tutores que ha tenido mucho éxito.

3) En la primera Asamblea de la Vocalía de Tutores en Madrid se describió un escenario lleno de carencias: falta de coordinación, de un registro de tutores a nivel estatal y por comunidades, falta de un marco estatutario propio como el de los MIR, falta de formación… ¿Cuál es, a tu parecer, la situación de los médicos tutores en Gipuzkoa?

Hoy en día hay una falta de reconocimiento de nuestra labor que se manifiesta día a día, tanto a nivel emocional  - escaso prestigio, poco apoyo institucional, exceso de carga de trabajo, ausencia de tiempo para tutorizar, burocracia…- , como material - falta de retribución específica de la labor de tutorización, falta de horas para tutorizar-.

Además, destacaría los problemas que han expuesto los tutores de AP y AE en la encuesta sobre su situación que realicé en el mes de noviembre: nos falta un programa de formación debidamente estructurado, también un diploma específico, falta que se dé respuesta al déficit de tutores, que se apoye la labor por parte de las jefaturas (especialmente en AP).

También hace falta, en mi opinión, cohesionar más al colectivo, ya que existe una falta de comunicación y organización entre nosotros mismos.

4) ¿Qué cambios habría que realizar para un mejor funcionamiento?

Por una parte, a nivel estatal, se está trabajando en regularizar un marco normativo común, realizar un programa formativo básico que fomente el profesionalismo y la investigación, conseguir un documento oficial acreditativo a nivel nacional (actualmente un tutor de una comunidad autónoma no puede tutorizar en otra), elaborar un Estatuto del Médico Tutor, conseguir una retribución acorde con la responsabilidad y dedicación y prestigiar y dar reconocimiento al tutor. Para esto ya se han puesto en marcha varios grupos de trabajo integrados por los Vocales de tutores de las distintas CCAA y se han mantenido reuniones con los responsables políticos y sociales correspondientes.

En cuanto al Marco Estatutario, el País Vasco es de las pocas CCAA que tienen desarrollado un Marco Normativo  (Decr 34/2012, 6 marzo de Ordenación del Sistema de Formación Especializada en la CCAA del PV) pero es cierto que muchos de sus puntos no se cumplen. Mejoraría mucho nuestra situación, por ejemplo, si lográsemos una mayor implicación de las jefaturas en el reconocimiento y mejora de las condiciones del tutor, consiguiendo que el proceso docente sea una línea estratégica de Osakidetza y que se cumpla el art 23 y 24 3b del Decreto 34/2012, 6 marzo del  BOPV referente al reconocimiento de la figura del tutor (Marco Normativo). En este artículo se especifica que el médico tutor dispondrá de un número de horas determinado en su jornada laboral para tutorizar, que habrá un reconocimiento específico en la carrera profesional y en procesos de selección y provisión así como preferencia en actividades de formación e incentivo económico individual retribuido mensualmente. Si esto se cumpliese estoy segura de que habría un incremento del número de tutores, sobre todo, en AP donde la situación es preocupante.

Finalmente, creo que también hace falta cohesionar más al colectivo, ya que existe una falta de comunicación y organización entre nosotros mismos.

5) A pesar de todas estas carencias, ¿qué os aporta la labor formativa de residentes? ¿Qué le dirías a un médico para que se anime a ser tutor?

Haciéndome eco de las opiniones vertidas en la encuesta realizada a los propios tutores de Gipuzkoa, diría que la docencia es una opción enriquecedora, necesaria y gratificante, una oportunidad de encontrarnos y compartir inquietudes. Y es que los tutores también aprendemos de los MIR y el hecho de impartir docencia nos obliga a estar actualizados. Pero, sobre todo, diría que es una obligación ética para con la sociedad: el transmitir aquellos conocimientos que nos fueron dados a nosotros.

6) ¿Cuáles son tus objetivos para el 2018?

Como objetivos para este año me planteo continuar mi participación en los grupos de trabajo a nivel nacional, potenciar la formación para tutores desde el CM en coordinación con la UD de AP, las OSIs y Osakidetza y solicitar una reunión con representantes de este organismo para hablar de la situación de los tutores, de la aplicación  del Marco Normativo y de posibles mejoras. También quiero convocar reuniones periódicas con los tutores para informarles y continuar con el intercambio de opiniones.

ENTREVISTA EN VÍDEO:

Belén Lopez Rubio, Vocal de Tutores