Guillermo Nuñez, mejor expediente académico de los Premios Fundación 2021: Habría que darle más peso a la práctica
Entrevistas¿Quién es Guillermo Nuñez?
Soy Guillermo Nuñez, médico azkoitiarra. Me gradué en medicina por la UPV/EHU y ahora estoy formándome como residente de Neurología en el Hospital Universitario de Donostia.
¿Qué ha supuesto este premio para ti?
La verdad es que me hace mucha ilusión este premio, es un reconocimiento a años de duro trabajo. Medicina es una de las carreras más exigentes que hay y la que entra es gente muy buena y que está muy preparada; que se me reconozca entre compañeros tan buenos es todo un honor para mí.
Al final es una recompensa a todo el esfuerzo que hacemos como estudiantes de medicina para poder sacar adelante esta carrera, muchas horas invertidas que acaban teniendo su fruto. No solo esfuerzo por nuestra parte, también por parte de toda la gente que está detrás echándonos un cable en los momentos más duros. Este premio es en gran parte para mi familia y amigos que siempre me han ayudado y han intentado hacer que este camino fuera mucho más ameno.
¿Ha cumplido la carrera de medicina tus expectativas?
Cuando entré en la facultad ya sabía que iba a ser un camino largo y en ocasiones duro, no me pilló desprevenido. En general estoy contento con mi formación, creo que la gran mayoría de docentes que he tenido han sido muy buenos y se han preocupado en formarnos de la mejor manera posible.
Es verdad que sí que creo que en ocasiones se peca de hacernos estudiar incontables páginas de teoría, conceptos memorísticos que quizás luego no tengan tanta importancia en la práctica clínica diaria. En mi opinión, habría que reforzar todo esto con más horas de práctica para los estudiantes de medicina, darle más peso en formarlos en hacer buenas anamnesis y exploraciones físicas y quizás algo menos a la pura teoría.
En los últimos años esto está cambiando, los estudiantes cada vez tienen más prácticas, se estudia más a través de casos clínicos en las clases etc. pero creo que todavía es algo que podemos mejorar.
¿Cómo va tu primer año MIR?
De momento va todo muy bien, estoy muy feliz con esta nueva etapa de mi vida. He tenido la suerte de poder elegir la especialidad que me apasiona (y la más bonita de todas) en un gran hospital como es el de Donostia.
El cambio es bastante grande, pasamos de estar meses estudiando muchas horas al día entre libros preparando el examen MIR sin ver ningún paciente a poder ejercer como médicos, atendiendo y ayudando a la gente, siempre con supervisión eso sí. Estoy aprendiendo mucho estos primeros meses de residencia, formándome y adquiriendo progresivamente cada vez más responsabilidades. Es un lujo poder trabajar de lo que desde siempre me ha gustado, ejerciendo la medicina.
Además estoy encantado con los compañeros de trabajo, la acogida en el hospital ha sido muy buena por parte de la mayoría de gente, el ambiente de trabajo es estupendo y todo esto ayuda muchísimo a que todo vaya mucho mejor y de manera más rodada.