Entrevista a Xabier Altuna, jefe de servicio de Otorrinolaringología del Hospital Donostia
EntrevistasAcaba de volver de Barcelona, donde ha recogido el “Premio Médico” de la Federación AICE (La Federación de Asociaciones de Implantados Cocleares de España), un galardón que ha premiado su “la labor múltiple y la búsqueda de soluciones, a medio y largo plazo, que resuelven los problemas de los/las pacientes”, han subrayado desde AICE. Hablamos con nuestro compañero para conocer más de cerca esta labor.
- Lo primero zorionak. ¿Qué sientes ante este reconocimiento?
Muchas gracias. Siento que se reconocen las horas de estudio, entrenamiento y trabajo que hay detrás de todo el proceso de implantación coclear. Y que el reconocimiento venga de la Asociación de Implantados, es decir, de los pacientes implantados y/o familiares de implantados es muy emocionante.
- El Hospital Donostia es el centro de referencia en la implantación de implantes cocleares. ¿Cómo ha avanzado esta técnica en los últimos años?
Si nos ceñimos a la técnica, como la mayor parte de cirugías, en los últimos años somos mucho menos traumáticos y hacemos cirugías mucho menos invasivas. Comenzando por la incisión, siguiendo por el tratamiento que realizamos de hueso temporal y terminando por el interior de la cóclea, donde las inserciones son ahora tremendamente conservadoras con la anatomía intracoclear. Diría que somos muchísimo menos traumáticos con las estructuras del oído que lo que se era antes.
Si pensamos en la selección de candidatos, activación, rehabilitación del implante, así como los avances de los implantes y los procesadores, puedo decir que hemos avanzado muchísimo en los últimos años. Todos estos avances en los campos mencionados hacen que lleguemos a un número mayor de candidatos y hacemos que su calidad de audición y su calidad de vida sean francamente mejores.
- ¿Qué retos existen en este ámbito?
Los retos de futuro es que podamos seguir llegando a todos los pacientes que lo necesiten. Y que ningún candidato potencial a un implante coclear se quede sin él.
Como en todos los ámbitos de la medicina existe un reto de dar respuesta a un aumento de demanda. El reto económico que supone es importante pero el más importante es el de los recursos humanos, poder conseguir médicos y audiólogos especializados en un campo tan específico.
A nivel tecnológico me gustaría que se pudiera avanzar (ya se está haciendo y nuestro Hospital es pionero en este campo) en la activación y seguimiento de los dispositivos y de los pacientes implantados de forma remota, es decir, desde su propio domicilio.
Otro reto es el poder conseguir un implante totalmente implantable, es decir, sin componente externo. Es algo que los pacientes valorarían muy positivamente, especialmente los pacientes pediátricos.
- ¿Qué te gustaría conseguir en lo que te queda de trayectoria profesional? ¿Con qué logro sueñas?
Me gustaría que el programa de Implantes Cocleares del Hospital, referencia actualmente en el territorio, continuase creciendo. No sólo para llegar a más gente sino para dedicar a cada uno de nuestros pacientes todo el tiempo que merecen. La labor de investigación que realizamos exige un tiempo más allá del meramente asistencial y esto se consigue con mayores recursos, especialmente humanos y cualificados como he mencionado previamente.
Me gustaría ver el implante coclear personalizado, es decir, para cada individuo, para cada etiología y cada anatomía específica.
Me encantaría que avanzásemos en el diagnóstico etiológico de la hipoacusia, en especial en el genético, la etiología más prevalente de la edad pediátrica, y que pudiésemos revertir la hipoacusia que se produce en estos casos, algo que ya puede conseguirse con determinados genes.
Por último, ya que la lista de deseos puede ser infinita, me gustaría llegar a ver la regeneración de las células ciliadas en la cóclea de los pacientes con hipoacusia.
- ¿Qué papel tiene en todo ello la investigación?
Fundamental. La investigación en la medicina es clave para seguir avanzando y mejorando. Y si además la tecnología está involucrada, como en el campo de los implantes auditivos, la investigación es un deber.
- Compaginas tu trabajo en el Hospital Universitario de Donostia con la actividad privada, la docencia, la investigación… y eres miembro de las Sociedades Vasca de Otorrinolaringología, de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Patología Cérvico-Facial, de la Sociedad Española de Base de Cráneo y de la American Academy of Otolaryngology-Head and Neck Surgery. No puedo dejar de preguntarte cómo llegas a todo.
Pues a veces yo también me lo pregunto. Pero hay varios factores determinantes.
Uno de ellos es rodearte de un buen equipo. Y yo tengo la suerte de haberlo conseguido. Rodearte de médicos competentes e ilusionados, audiólogos, equipo de enfermería y auxiliares, así como de administrativos, hace que pueda llegar a cosas que de otra forma no podría.
Otro es el no perder el tiempo o mejor dicho aprovechar todo el tiempo posible. El día da para mucho si no perdemos el tiempo en distracciones que no llevan a ninguna parte. Y eso hoy en día es aún más importante recordarlo, con toda la distracción a la que tenemos acceso con un solo click.
Debo confesar que tengo la costumbre de levantarme muy muy temprano por la mañana y en ese rato, antes de que la “actividad” comience, aprovecho mucho el tiempo.
- ¿Cuál es la actividad que realizas para desconectar del trabajo?
Necesito del deporte para desconectar. En concreto, deporte que se realice al aire libre. Me gusta surfear, esquiar, salir a la montaña, en bici o caminando….
La familia también me ayuda mucho para desconectar. Paso el mayor tiempo posible con ellos (mi mujer Mayi y mis hijos Martin y Luis de 13 y 14 años). Tengo la suerte de que ellos también tienen las mismas aficiones que yo y podemos realizarlas juntos.
Ha recibido el “Premio Médico” de la Federación AICE